viernes, 28 de marzo de 2008

Tú dices, yo digo

Hace tiempo que no escribo nada... ni paso por acá... ni nada... y qué más puedo pretender? post tsunami no puedo hacer mucho más... cuando la caída es fuerte, la levantada es dura... no digo que es imposible... sólo que es más lenta...

Hoy recibí un mail muy especial... oportuno para este momento... Aquí unos fragmentos...

Cómo hacerte saber que siempre hay un tiempo
que uno sólo debe buscarlo y desearlo
que nadie establece normas, salvo la vida
que la vida sin ciertas normas pierde la forma
que la forma no se pierde con abrirnos
que abrirnos no es amar indiscriminadamente

que la agresión porque sí, duele mucho
que las heridas se cierran pero dejan huellas,
que las puertas no deben cerrase
que la mayor puerta es el afecto
que los afectos nos definen
que definirse no es remar contra la corriente
que negar palabras implica abrir distancias
que encontrarse es muy hermoso
que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida
que la vida forma parte del sexo

que autodeterminarción no es hacer cosas solo
que nadie quiere estar solo
que para no estar solo hay que dar
que para dar tenemos que recibir antes
que para que nos den también hay que saber pedir
que saber pedir no es regalarse
que regalarse es no quererse

que para que alguien sea hay que ayudarlo
que ayudar es poder alentar y apoyar

que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo
que para sentir la vida no hay que olvidarse que existe la muerte
que se puede estar muerto en vida
que se siente con el cuerpo y con la mente
que con los oidos se escucha
que cuesta ser sensibles y no herirse

que herirse no es desangrarse
que para no ser heridos levantemos muros
que quien siembra muros no cosecha nada
que casi todos somos albañiles de muros
que sería mejor construir puentes
que sobre ellos se va a la otra orilla y se vuelve
que volver no implica retroceder
que no por mucho madrugar se amanece más temprano

Cómo hacerte saber que nadie establece normas, salvo la vida...

Y el mail terminaba diciendo: reíte siempre, que la risa es cosa seria...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hay quien dice que esto es de Walt Whitman. Presumo que se trata de alguien que jamás leyó nada de Whitman...

Hay otros que le adjudican este mismo poema a Jorge Luis Borges, para presumible desesperación de María Kodama, que dirá que se trata de alquien que jamás leyó a Borges.

La mayoría se lo adjudica a Mario Benedetti, en cambio, lo cual me suena más razonable, aunque al mismo tiempo se me hace que tampoco es su estilo... No está incluido en sus "Inventario"... Y habida cuenta de otros poemas de este mismo tenor falsamente atribuidos a otros autores, tiendo a desconfiar. Vos que sos fanática del yorugua, acaso pudieras confirmar su autoría o la entidad apócrifa de estas líneas...